Foto: Nancy Bonilla, Tijuana, BC.
¿Por qué construir una agenda propia para lesbianas?
Las lesbianas en México enfrentan un doble proceso de discriminación, por ser mujeres y por su orientación sexual, la mayoría no logra ejercer su plena ciudadanía debido a que no existen políticas dirigidas específicamente a atender las necesidades de esta población. Un ejemplo de ello es que a pesar de los logros alcanzados por los movimientos feministas y LGBTI en la CDMX, una ciudad que se reconoce a sí misma LGBTI amigable, las lesbianas siguen siendo una de las 10 poblaciones más discriminadas.
Si hablamos de derechos políticos, actualmente se desconoce el dato sobre lesbianas en cargos públicos en todos los niveles, siendo este un ejemplo de su invisibilización; ésta se traduce en falta de información, servicios y ambientes pertinentes para el ejercicio de sus derechos humanos, generando condiciones de vulnerabilidad. En contraste, las lesbianas se han involucrado en el trabajo por los derechos humanos de todas las mujeres desde diferentes contextos, esto esporádicamente se ha relacionado con la defensa y promoción de sus propios derechos; de hecho, las lesbianas que participan en espacios políticos enfrentan violencia sistemática, impidiendo que se reconozcan los aportes que realizan a la transformación de la sociedad; esta situación también ha obstaculizado el desarrollo de una agenda propia para el avance de sus derechos.
Por otro lado, el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES) tiene por mandato mejorar las condiciones de vida de la población femenina, con el propósito de erradicar toda forma de discriminación hacia las mujeres, así como procurar la igualdad de condiciones y de trato entre los géneros, en coordinación con las organizaciones de la sociedad civil.
Con este propósito, y ante el desafío de diseñar e instrumentar políticas públicas en las que participen las instancias gubernamentales y civiles, el Inmujeres estableció en el año 2002 el Programa Fondo Proequidad, ahora Programa Proequidad, con el objetivo de apoyar a organizaciones de la sociedad civil para que desarrollen proyectos orientados a impulsar el adelanto de las mujeres y la igualdad de género en los ámbitos social, político, económico o cultural.
Es en este marco, el Clóset de Sor Juana AC ha encontrado en el INMUJERES una interlocución y espacio para el reconocimiento de los derechos y la construcción de una agenda propia para las lesbianas con el proyecto “SIN LESBIANAS NO HAY DEMOCRACIA: HACIA UNA AGENDA INTEGRAL”
¿Qué estamos buscando?
Promover la participación política de las lesbianas mediante el fortalecimiento de la articulación nacional y la elaboración de agendas específicas.
¿Cómo?
Identificando los tipos de participación política de las lesbianas mediante un diagnóstico.
Impulsando procesos de formación política dirigidos a lesbianas: #ComaldeIncidencia2016
Elaborando una agenda de política pública donde se reconozcan las necesidades de las lesbianas
¿En qué vamos?
A lo largo del año hemos trabajado con lesbianas activistas y defensoras de derechos humanos de 16 estados de la república en un proceso llamado #ComaldeIncidencia2016, identificando iniciativas y condiciones de la participación política lésbica a nivel nacional, compartiendo herramientas metodológicas y experiencias para la incidencia, documentando nuestra historia como movimiento por medio de videos documentales y trabajando en la construcción de una agenda de política pública sobre necesidades de las lesbianas.